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FAQ

Preguntas frecuentes

Aquí encontrarás algunas preguntas y respuestas que se hacen los padres y los niños cuando viven la experiencia de tener un diagnóstico de TDAH, además de tener que tomar decisiones, combinar diferentes tratamientos y hacer cambios para aprender a afrontar los síntomas y, sobre todo, aprender a creer en ellos mismos.

Si no encuentras respuesta sobre la información que buscas, no dudes en ponerte en contacto con nosotros a través del formulario que tienes en está página.

 

¿Tener TDAH significa tener una enfermedad?

No. El TDAH no es una enfermedad, aunque hablemos de síntomas y en muchos casos, sea necesario tomar una medicación.

El TDAH es de origen neurobiológico, es decir, que las células del sistema nervioso y su organización en circuitos funcionales, se han desarrollado de tal forma que explican el comportamiento y los síntomas que se presentan.

Como si dijéramos que el desarrollo del cerebro presenta variaciones en los niños y niñas que son TDAH.

Los científicos han podido decir que en el 80% de los casos de niños y niñas diagnosticados el origen es genético.

 

¿El TDAH está relacionado con tener más o menos inteligencia?

La inteligencia no tiene que ver con el TDAH.

Los niños y niñas TDAH tienen la misma inteligencia que los demás.

Es un problema para asimilar e interiorizar la información y de saber cómo expresarla.

Entonces lo que pasa es que se puede afectar el desempeño escolar.

En el caso de niños y niñas con más inteligencia se compensan mejor las dificultades derivadas de ser TDAH.

¿Qué problemas tienen los TDAH?

Por una parte, están los problemas propios de ser TDAH: ser capaz de mantener la atención, controlar los impulsos y controlar el nivel de actividad. 

Estos problemas influyen en el deterioro de la capacidad de controlar la conducta a lo largo del tiempo y de proponerse metas y valorar las consecuencias futuras.

Diferentes profesionales están de acuerdo en que además se presentan dos problemas adicionales, que incluso pueden llegar a confundir: seguir las normas e instrucciones y una excesiva variabilidad en las respuestas a las situaciones, particularmente en lo escolar y el trabajo.

Esas características van generando más dificultades a lo largo del tiempo, como pueden ser: desorganización, falta de autonomía, problemas de comportamiento, mantener el esfuerzo, dificultades de aprendizaje, memorizar, baja tolerancia a la frustración, desregulación emocional.

Con el paso del tiempo y dependiendo de circunstancias familiares, escolares y del entorno, los TDAH, puede tener mayores dificultades y problemas asociados. Estos pueden ser: Trastornos del comportamiento, problemas alimenticios, problemas del sueño, baja autoestima, fracaso escolar, mayor implicación en conductas de riesgo y antisociales.